Aprovechando el buen tiempo que estamos teniendo, los miembros del equipo veterano han iniciado sus entrenamientos. Con la tranquilidad que proporciona el Bidasoa en verano, practicar con los botes río arriba, es un auténtico lujo. Los días 27 y 31 de julio, tuve ocasión de acompañarles en su entrenamiento y ciertamente disfrute casi tanto como remando. Desde el catamarán, la vista de un bote navegando es algo que tiene una plasticidad digna de ser recogida por los mejores fotógrafos, y aprovechamos estas salidas para obtener unas instantáneas, que nos pueden venir muy bien, para analizar nuestras posturas, y tratar de enmendar nuestros errores... Lo de ser autodidactas tiene su peaje, ahora nos toca corregir aquello que no hacemos bien.

Ahora, a dominar los dos remos, a aprender a caerse y a montarse, porque seguro que algún día nos hace falta. Algunos ya somos unos expertos en caídas, pero en montarnos no somos tan hábiles.

¡Creo que lo podemos pasar muy bien! Teniendo claro que nuestro objetivo principal es aprender y divertirnos, y si además de eso, podemos aportar algo a nuestro club, pues miel sobre ojuelas...
¡Que los espíritus del Bidasoa se fijen en nosotros! ¡Quizá así aprendamos un poco más y nos cundan las horas que metemos!
Sigamos disfrutando del verano, remando, viendo remar, hablando de remo, a orillas de nuestro río, bañados por el sol... ¿¡Hay alguien que dé mas!? Por cierto hoy nuestra nueva incorporación, Antxon ha salido en el cuatro scull con Arantxa Mariskal, Jesús Portos y Jose Antonio Portugal, y ha sido una gozada verles remar. Como colofón del día, hemos visto en acción al lujoso 8 con timonel de Santiagotarrak, que pronto volveremos a ver luchando por esos campos de regatas a los que acudimos. ¡Definitivamente, no se puede pedir más!
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